Preparar un huerto urbano

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En los últimos años, cada vez han sido más los que se han empezado a concienciar con los huertos urbanos. Prepararse uno en casa es el sueño de muchos y la pesadilla de otros. Porque no todos/as al final llevan a buen término el huerto. Se les termina finalmente la paciencia, se les llena las verduras de plagas, los frutos o verduras no terminan de crecer, se les mueren las verduras, etc. Por tanto, se cabrean y lo desmontan o lo tiran todo aludiendo a qué es muy complicado tener un huerto urbano. Pero, ¿es eso verdad? Pues sinceramente… no.

Sólo es necesario saber qué has de hacer y por supuesto, cómo tienes que hacerlo. También tienes que tener en cuenta que no todo sale de un día para otro, que esto no es irse a un supermercado y comprarse uno mismo las verduras que se quiera. Hace falta un proceso y una evolución.

Para saber realmente de qué se trata un huerto urbano os lo contamos brevemente. Puede ser de dos tipos, el colectivo o el privado. Bien en casa de cada uno/a o para quien no disponga de espacio, terrazas, jardines… hay espacios libres que pueden estar al aire libre o cubiertos y se puede compartir espacio con otras personas y cultivar cada uno/a lo que quiera.

Instrucciones

  1. En un huerto urbano lo que se planta y cultiva tanto si está al aire libre o está cubierto, si es privado o se comparte, tiene en común lo mismo. No es un huerto donde pueda haber de todo, ni plantas, ni a gran escala. Son huertos que están destinados a poder cultivar todo lo que sea para el consumo y siempre en pequeñas cantidades. Es decir, a pequeña escala y no invernaderos.
  2. Lo normal en este tipo de huertos urbanos que cualquiera puede preparar y ponerse manos a la obra (y que os contaremos cómo hacerlo) es cultivar hortalizas, plantas aromáticas, hierbas con uso medicinal, frutas, etc.
  3. También suelen tener en común este tipo de huertos, a parte de cada uno/a cultiva lo que le apetece, lo que le gusta, lo que necesita y lo que más utiliza, es que una vez ya tienes el alimento, lo retiras y puedes consumirlo al instante y no solamente eso, sino que sabes cómo ha sido cultivado y cómo ha sido tratado. Un huerto totalmente ecológico, sin pesticidas ni productos tóxicos. Son los llamados los huertos sostenibles, ecológicos y sostenibles por tanto.
  4. Dicho todo lo anterior, empezamos a contaros qué necesitáis como mínimo para empezar con vuestro huerto urbano. El espacio. Es necesario saber qué espacio se tiene disponible, qué espacio tenéis para habilitar un huerto y decantaros según vuestras necesidades entre uno pequeñito o uno más grande. Como consejo, si es la primera vez que vais a montar uno y tampoco sabéis demasiado ni disponéis tiempo, lo que aconsejamos es que montéis un huerto más bien pequeñito al principio. Si con el tiempo veis que os va bien, que podéis con otro o uno más grande, pues adelante. De esta manera, evitaréis que os estreséis, que tiréis la toalla como ocurre muchas veces.
  5. Una vez que decidáis dónde vais a colocar el huerto tenéis también que pensar que va a ser lo que queréis plantar. Dependiendo de lo que sea, puede ser un huerto vertical u horizontal. De esta manera puede ser más voluminoso o no tan aparatoso. Puede ser un huerto en el jardín, en una terraza, en un pequeño patio, en un balcón, etc.
  6. Algo que si debe ser importante es la iluminación. No tanto el espacio (que podéis tener un huerto minúsculo) pero si es necesario que le llegue luz solar para que crezca todo bien y se desarrolle. Ten en cuenta que por ejemplo, las verduras y hortalizas necesitan mucho sol directo. En cambio, las plantas aromáticas, también, pero no necesitan la misma cantidad. Por ejemplo, esto lo podéis tener en cuenta también a la hora de preparar vuestro huerto urbano.
  7. Lo primero que deberás tener es un semillero. Aquí tienes que tener en cuenta lo siguiente: no es lo mismo que empieces a plantar mediante semillas (que necesitarías tu semillero) a que en cambio, compres ya las hortalizas o verduras crecidas y debas plantarlo únicamente. Por tanto, tenlo en cuenta y te ahorrarás empezar a gastar dinero. En cuanto a los semilleros, los hay de todo tipo y de todo tipo de pijadas, colores, tamaños, calidades y colores. No hace falta realmente gastarse un dineral para un simple semillero. Es absurdo. El más básico y es igual de efectivo. Es más, se puede hacer incluso de manera más rudimentaria y reciclar. ¿Cómo? Os doy dos posibilidades.
  8. O bien, aprovechando una huevera. El cartón que te viene debajo de los huevos puede ser el semillero. Cada espacio del huevo, será un semillero. O también, con los botes de yogur de plástico vacío. Cada bote, será un semillero.
  9. Las macetas. Las macetas serán imprescindibles para poder plantar las verduras, hortalizas, plantas aromáticas, etc. Una vez que ya hayan echado raíces en el semillero, se trasplanta a la maceta o también otra posibilidad es la de trasplantarlo en jardineras que sean grandes. Esto va más por gustos o necesidades. Por ejemplo: no es lo mismo una terraza muy pequeña, donde sólo se puedan tener dos macetas, que un patio donde se puede colocar una jardinera. También puede tenerse en cuenta la estética que queráis darle. Si aprovecháis materiales y no os importa tanto o por el contrario preferís una jardinera grande y plantarlo todo ahí. Por tanto, os decimos qué podéis utilizar y cómo, pero vosotros/as seréis los que tomareis las decisiones.
  10. En espacios reducidos o si podéis gastaros más dinero, es interesante también la posibilidad de las nuevas macetas que son textiles. Mas bien se le llaman geotextiles. Se trata de macetas que están elaboradas de un tejido muy fino y concreto que no pesa absolutamente nada. Eso sí, pesará lo que tú plantes. El agua queda impregnado, no hay riesgo de fugas.
  11. Algo más útiles, aunque también de precio más elevado, son la variante anterior pero con ventana. ¿Cómo es eso? Se trata de jardineras que están elaboradas con el mismo material que el anterior. Pero están más indicadas para la plantación y su posterior recolección de hortalizas o verduras que crecen bajo tierra. De esta manera, se ve el crecimiento y el proceso en todo momento y de esta manera, es más rápido y visual poder recogerlo. Es muy útil por ejemplo, en caso de las zanahorias, las patatas, los rábanos, las cebollas, etc.
  12. Dejando ya este tipo de recipientes para el cultivo, pasamos a los más habituales como la mesa en horizontal y los que son verticales. Aquí el papel más importante es el que vosotros decidáis. Si son por ejemplo plantas aromáticas, tal vez, como se recogen con menos asiduidad y su crecimiento es más o menos rápido, el vertical es muy utilizado y práctico. También es más visual y queda muy bien a la vista, al olfato con sus aromas y puedes catalogar las diferentes plantas según para qué platos quieras utilizarlos. Por dar ejemplos…
  13. Para los que no tengáis ninguna de las dos posibilidades en cuanto a tener espacios libres, podéis hacer un mini huerto dentro de casa y también sin luz solar. Normalmente se suele plantar hierbas aromáticas y hortalizas pequeñas como chili, pimientos mini y tomates cherris. Para hacer este tipo de huerto se necesita el llamado cultivo hidropónico. Esto se trata de una pequeña jardinera que está formulada con un sistema en el que circula el agua por dentro y aumenta a su vez el oxigeno. Para la iluminación, contiene luces de led (para consumir menos) y de esta manera, se intenta imitar la luz solar aunque obviamente no sea lo mismo. No son excesivamente económicos, pero si os apetece tener uno es una buena idea.

Que Necesitas

  • Tierra.
  • Semillas de las hortalizas, verduras o hierbas aromáticas que queráis plantar.
  • Agua para regar.
  • Las hortalizas, las verduras, las plantas o hierbas aromáticas, plantas medicinales… lo que queráis cultivar.
  • Tiestos, macetas, jardineras, mesa alta, mesa de cultivo, jardineras verticales, etc.
  • Semillero.
  • Huevera, botecitos de yogur vacíos (para hacer un semillero reciclado).
  • Una pala pequeña.
  • Tijeras.

Consejos

El huerto urbano es cada vez más practicado o por lo menos se intenta en mayor o menor escala dependiendo del espacio, la maña de cada persona y el presupuesto. Si se tienen niños pequeños puede resultar muy útil para que aprendan a cultivar, a cosechar sus propios alimentos, en familias ayuda a ser participativos, colaborativos, ayuda a desestresarse, a relajarse, a ser menos contaminante, más sostenible, etc.

En este tipo de huerto, se puede plantar todo tipo de verduras y hortalizas: ajos, tomates, pepinos, calabacines, pimientos, limones, fresas, lechugas, patatas, rábanos, espinacas, alcachofas, zanahorias, acelgas, rúcula, moras, aguacates, etc. De hierbas aromáticas, las que más utilicéis en casa o en vuestros platos, son las que podéis cultivar vosotros mismos en casa. La hierbabuena, la menta, el perejil, albahaca, lavanda, romero, tomillo, hierbaluisa, etc.

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